Los Almirantes de Castilla tuvieron en Valverde una casa palacio. La iglesia parroquial de Santa María comenzó a construirse en el s.XVI.
A unos 39 kms. de Valladolid, 6 kms. al sur de Medina de Rioseco, por la C- 611, se llega a esta población, que se esconde en un pequeño recoveco entre páramos y desde los cuáles se puede descubrir una fértil vega, con algún que otro palomar.
En la primera calle según se entra en el pueblo, llegamos a la iglesia dedicada a Santa María. Una iglesia del siglo XVII, construida en estilo gótico de una sola nave y con bóveda de cañón de lunetos, toda ella rematada con una espléndida espadaña. Puede visitarse contactando con el Ayuntamiento. Merece ser destacada la presencia de un Cristo en madera policromada del siglo XIV y el retablo mayor con la escenificación del Nacimiento de Jesús. Numerosas imágenes de santos y vírgenes completan la visita. También merece la pena incluir en esta breve visita al pueblo, la Casa-Palacio del Marqués de Monreal (s. XVIII), que si bien no se puede visitar al ser propiedad privada, sí se puede admirar su porte, la muralla que lo rodea y un pequeño arco que da entrada al terreno.
En Valverde de Campos, o lo que es lo mismo, en "valle verde de Campos", se dice que los restos de San Isidoro en el año 1063, reposaron en la localidad, cuando era trasladado de Sevilla a León. Otras anécdotas o leyendas del pueblo cuentan, que en los páramos de los alrededores hay un burro de oro enterrado, y muchas tardes son los niños del lugar los que sin éxito, pero con entusiasmo, son lo que andan a su caza y captura.
Una buena época para visitar el pueblo puede ser el 25 de mayo, San Urbano, día en el que los lugareños celebran sus fiestas patronales, con juegos típicos como la tanga y la calva. Si lo que se prefiere, es disfrutar de una buena parrillada, se organiza el 16 de agosto, San Roque, acompañada de la hoguera que se enciende la noche de la víspera.